Un par de sandalias, un sonajero y un mechón de pelo (hallazgos arqueológicos en Antofagasta de la Sierra)
Por Claudia Rodríguez Paoletti

En Antofagasta de la Sierra, provincia de Catamarca (Argentina), un equipo de arqueólogos ha identificado restos que aportarían nuevas evidencias sobre la temprana ocupación humana del sector puneño compartido con la vecina provincia de Salta. Aunque las evidencias recuperadas son escasas y están restringidas a ciertos sectores acotados, han sido datadas con una antigüedad mayor a la que se estimaba hasta hace algunos años. Las acumulaciones posteriores revelan una importante concentración de material cultural —cerámica, restos líticos, fauna y vegetales— cuya cronología se sitúa entre aproximadamente 1.000 y 1.400 años antes del presente.

Alero del sitio arqueológico del Cacao 1.A., en Catamarca, donde se hallaron restos
humanos
Las sandalias: características y posible simbolismo
Uno de los hallazgos más destacados en la Cueva Cacao 1A corresponde a un par de sandalias de manufactura compleja. Según Vidal, Olivera y Grana (2003), estas piezas fueron originalmente datadas con una antigüedad considerable, la cual se ha incrementado con nuevas dataciones. El cuero utilizado en la confección de las plantillas inferiores provendría, por su morfología, del sector del cogote del animal, mientras que los cordeles del empeine serían de la misma procedencia.
A partir de las dimensiones registradas, los autores concluyen que estas sandalias corresponderían a un pie de tamaño pequeño. Presentan una doble plantilla que cubre únicamente el empeine. La única decoración evidente consiste en la presencia de una pluma rosada en cada sandalia, posiblemente de suri (Rhea pennata), ave cuyo plumaje se asocia tradicionalmente con la realeza andina. Tanto el arte rupestre como la iconografía y la mitología del altiplano sugieren que el suri era considerado un símbolo sagrado, asociado con el anuncio de lluvias.
El sonajero: análisis y procedencia
En relación con el sonajero hallado, los investigadores llevaron a cabo un análisis mediante técnicas no destructivas. El examen por rayos X reveló la presencia de aproximadamente 30 semillas redondeadas, con un orificio central. Posteriormente, algunas de ellas fueron extraídas, constatándose que se trataba de semillas de tonalidad negro parduzca y un diámetro de aproximadamente 5 mm. Aunque su identificación aún es parcial, se presume que pertenecen a una leguminosa exógena al ecosistema puneño.
E l sonajero fue construido a partir de una calabaza, cuyo orificio superior fue cerrado con una valva redondeada y pulida de bivalvo marino, probablemente proveniente del océano Pacífico. Este detalle refuerza la hipótesis de la existencia de redes de intercambio interregional.
El mechón de cabello humano: datación y relevancia
Uno de los descubrimientos más sorprendentes es el de un mechón de cabello humano, el cual ha sido fechado preliminarmente en unos 40.000 años de antigüedad. Dicho análisis fue realizado en el laboratorio CAIS de la Universidad de Georgia (Estados Unidos) y en laUniversidad de Oxford. Aschero señala que, si bien el cabello presenta un corte recto en la zona de inserción, no se obtuvo material genético suficiente para un análisis de ADN,aunque se prevé realizar nuevos intentos en otros laboratorios especializados.
En caso de confirmarse dicha antigüedad mediante pruebas de datación complementarias,estos hallazgos podrían cuestionar la teoría académica dominante según la cual el poblamiento del continente americano comenzó hace aproximadamente 15.000 años, con grupos humanos provenientes de Asia a través del estrecho de Bering.

Pintura rupestre en la Cueva
Fuentes web
● Carlos Aschero: El arte rupestre como archivo de la memoria
● Terrae Antiqvae - Hallazgos en la puna catamarqueña
● CONICET (1993). El desierto que no fue Video documental